María G. Suárez

Mikel fue nuestro profesor en el curso de verano de la Universidad Complutense. Llegó con sus «juguetes», como él los llama, rompió todos nuestros esquemas de cómo funciona el cerebro, y luego nos enchufó los aparatos y midió nuestras emociones, fue genial! Le puso una imagen de una playa idílica a una chica peruana y le sugirió que le despertaba emociones negativas… y resulta que odiaba las playas! Espectacular.